La cantante estadounidense Kesha sorprendió al público que acudió al Brisbane Future Music Festival con una particular puesta en escena. En medio del concierto, la intérprete de "Tik Tok" tomó un corazón, lo apretó y bebió la sangre que tenía en su interior. La performance de la cantante impactó al público. Algunos de sus fanáticos gritaron para manifestar su apoyo, mientras que otros prefirieron mirar para otro lado. La estrella pop llevó a cabo la sangrienta actuación cuando interpretaba la canción "Cannibal", informa el sitio Popeater. Kesha suele planificar acciones que le permitan llamar la atención, pero no logra generar un efecto positivo, pues casi siempre logra sólo ser criticada. Declaraciones polémicas y fotos que la muestran desnuda son algunas de las estrategias a las que ha acudido la cantante para forzar una mayor popularidad.
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